miércoles, 20 de julio de 2011

Quien le iba a decir a aquella niña esa tarde del mes de Abril, que el chico cuyo rostro se oculataba tras las sombras, aquel frío y tentador hombre, la inteligencia personificada, con un físico arrebatador, capaz de hacer soñar con su sonrisa, llegaría a convertirse sin lugar a dudas del hombre de su vida.
Nada más hube escuchado una palabra de su boca, un canto de ángeles, un guiño a la muerte, supe enseguida que serías alguien. Quien se atreviera a decir por aquel entonces que ese día sería memorado, otro más, caluroso, insoportable. Esa mañana cuantas personas hubieran perdido a alguien y cuantas estaban por perderlo, pero ahora ella tenía al suyo, a su alguien particular y no acababa de perderlo, lo acababa de encontrar.
Aquel nombre innombrado jamás por sus labios, aquel modeo sin pasarela, aquel silencio gritado a la Luna que permanecía estática en el universo, aquel, y sólo aquel era lo que ella quería. Era lo que yo quería.

2 comentarios:

  1. Ahora lo único que tiene que hacer es mantenerlo a su lado :)

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  2. Parte difícil a largo tiempo y tan sólo con la ayuda de ambos se logra. Difícil sí, pero no imposible <3

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Deseos

No. No lo intentes. Hazlo o no lo hagas, pero no lo intentes.